
MOTIVACIÓN:
Repensar cómo las "necesidades" que impulsaron la misión siguen siendo relevantes hoy, adaptando el método a las nuevas culturas.
FRASE BÍBLICA:
“El Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido.” (Lc 19, 10)
REFLEXIÓN:
La necesidad de "predicadores, profesores, músicos" que pedía Don Bosco en 1875 es la misma necesidad que se vive hoy, pero adaptada a los nuevos lenguajes y plataformas. Se necesitan misioneros formados, alegres, capaces de tocar las fibras del corazón juvenil. La esencia de la necesidad es la misma: almas que se pierden por falta de quien les anuncie la Buena Noticia.
Repensar la misión implica una constante actualización y formación. El celo debe ir acompañado del conocimiento y de la competencia profesional. Debemos ser "santos y sabios", ofreciendo lo mejor de nosotros a los jóvenes. La misión exige excelencia y creatividad para ser relevantes en el mundo de hoy.
COMPROMISO:
Busca un nuevo "lenguaje" (una canción, un video, un formato digital) para llevar el mensaje de la fe.